Los delincuentes faenaban dos cabezas de la raza Brangus colorado, uno de cada lado del camino vecinal en colonia Aster y se dieron a la fuga al ser descubiertos. Los cuatreros no dan tregua en San Pedro y los productores desesperados ya no saben qué medidas tomar para evitar ser víctimas de un nuevo hurto
[Leer más]