Ella se llama María Ana Surniak, es artesana de cañas de castilla, hace canastos de variados tamaños y los vende en el Mercado Concentrador de Posadas. Este oficio milenario, lo aprendió hace 45 años en Paraguay, su país natal, de la mano de su suegro que se dedicó toda su vida a ello. En la actualidad forma parte de todo el preso comercial: planta las cañas, las corta, elabora las cestas y las vende.
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Ella se llama María Ana Surniak, es artesana, hace canastos de variados tamaños y los vende en el Mercado Concentrador. Este oficio milenario, lo aprendió
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Trabajar la caña para crear elementos que ayuden al traslado de comestibles u otras piezas de la vida cotidiana es un arte milenario. Los registros de mayor antigüedad, datados mediante carbono radiactivo, son de hace unos 10 mil años y fueron descubiertos en El-Fayum, alto Egipto. Esa modalidad recorrió el mundo y acá en la […]
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