La dirigente de raíz radical aseguró que fue expulsada del centenario partido para “tapar” las denuncias por violencia de género y misoginia que formuló contra el exdiputado Germán Bordón. Afirmó que “otros episodios de misoginia serán conocidos en breve porque habrá mejores condiciones para que las mujeres no toleren ningún tipo de violencia”. Aseguró que el radicalismo es un “espectador del gobierno del PRO” y que el Movimiento por la Democracia Social –que nuclea a radicales disconformes con el Gobierno nacional- buscará alianzas dentro de la provincia para presentar una alternativa tanto a la renovación cuanto a Cambiemos.
María Losada - Radio Libertad
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