“No sé nada. No me dijeron nada. Estuve toda la noche con la Policía hablando. Yo lo crié. No pueden pensar que la familia le pudo haber hecho algo”. Con el ojos envueltos en lágrimas, Francisco Adán Peñalva no encontraba aún alguna explicación al crimen de su nieto, Ulises Benjamín Amaya. Después de horas de espera, el hombre y el resto de su familia habían recibido el cuerpo del pequeño de cuatro años para poder darle el último adiós en la vivienda de El Colmenar, en Las Talitas, Tucumán.
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Si bien faltan los resultados de la autopsia, la Justicia cree que la muerte del niño se trató de un homicidio e investiga si antes de morir fue golpeado.
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La Policía investiga la muerte de Benjamín, el nene de cuatro años que apareció ahorcado en un puente en la provincia de Tucumán. “Sólo una persona inconsciente pudo haber hecho esto; no entiendo el por qué”, lamentó el abuelo. Sólo una persona inconsciente pudo haber hecho esto; no entiendo el por qué. Todo pasó muy rápido. El nene desapareció 10...
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