Te despiertas en mitad de la noche y te encuentras que no puedes moverte ni gritar para pedir ayuda. Apenas eres capaz de respirar, incluso sientes un gran peso en el pecho. Ademas percibes una presencia junto la cama, muy negativa, pero lo más importante de todo es que te sientes impotente para poder reaccionar.
[Leer más]
La explicación científica de por qué dormimos con la boca abierta no tiene nada que ver con problemas de respiración o con una falta de descanso de calidad.
[Leer más]